Ahora que ella regresó te necesito más que nunca.
Con todos sus aromas, sus grabados, su aire
adolescente, sus ojos cargados de un misterio
de novela.
Ella, volvió. De pronto. Como
un portazo al revés, como las antípodas de
todo un abandono.
Ella. Regresa. Hoy.
Nunca se fue del todo. Te digo, que vive
aquí. Conmigo, y tú tendrás, que resistirla.
Su poder es el poder de las palabras con todas
las evocaciones y aromas posibles. Su cuerpo
desnudo se paseará ante ti como siempre hizo
ante mi. Enloquecerás seguro, pero no morirás
si te agarras a mi, si soportas su poderoso andar
sin más ropajes, que la evocación que te sugiera.
Te hará inmortal.
Yo te prometo, que ella, pese
a todo, te hará resucitar de nuevo cada día.
Después de la pequeña muerte que en cada
orgasmo en tu unión a mi, ella nos resucitará.
Ella nos necesita más que nunca, ahora que
tú me darás el sí, ella nos matará y resucitará.
Ella. Sus aromas. Sus grabados. Su mirada
con un misterio que arropó tu desnudez
de página en blanco con sus palabras
y sus evocaciones. Ella se desnudará para que
tú y yo podamos seguir viviendo. Adolescentes
siempre.
A Emperatriz, musa de siempre
Aluche. Noviembre del 2020.
Las canciones del desconfinamiento.